Con un claro enfoque en la mejora continua y la preparación para los desafíos futuros, la Universidad Adventista de Chile (UNACH) llevó a cabo un importante taller de formación sobre aseguramiento de la calidad en el auditorio del aula C de la Facultad de Teología. Este ciclo de capacitaciones buscó fortalecer los procesos internos de evaluación y gestión académica, con miras al proceso de acreditación institucional del año 2026.
El taller, que se extendió desde el 08 al 13 de enero, tuvo como objetivo principal capacitar a los distintos estamentos académicos sobre la importancia de los procesos de calidad y su estrecha relación con la autoevaluación institucional. Durante la jornada inaugural, Josueth Naranjo, Director de Planificación y Aseguramiento de la Calidad de la institución explicó que la primera sesión se enfocó en vincular el aseguramiento de la calidad con el proceso de autoevaluación, mientras que las siguientes abordaron temas como los sistemas internos de control de calidad y la evaluación al interior de las distintas facultades y carreras.


El aseguramiento de la calidad, tal como lo definió Naranjo durante la sesión, fue presentado como un proceso interno que asegura el correcto funcionamiento de la institución en sus diversas áreas, desde la toma de decisiones hasta la evaluación de procesos. Comparó este procedimiento con el funcionamiento de una orquesta sinfónica, donde cada instrumento debe interpretar su parte de manera organizada y coordinada para lograr un resultado armónico y exitoso.
Durante el desarrollo de este taller de formación, destacaron las presentaciones del Dr. Carlos Mujica, con su exposición titulada “Aseguramiento de la Calidad”, y de Daniel López Stefoni, quien presentó el tema “Sistema Interno de Aseguramiento de la Calidad”. Estas intervenciones fueron especialmente relevantes, ya que profundizaron en los principios y metodologías clave para la implementación de procesos de evaluación institucional. Ambos expositores lograron captar la atención de los asistentes al ofrecer perspectivas prácticas y aplicables a la realidad de la UNACH. Sus aportes no solo enriquecieron el contenido del taller, sino que también inspiraron a la comunidad académica a asumir un rol activo en la mejora continua. Sin duda, estos momentos marcaron un punto alto en la jornada formativa de cuatro días.


«Queremos que todos hablemos el mismo idioma en cuanto a calidad institucional, desde los directivos académicos hasta los docentes en aula», señaló Naranjo, subrayando que la academia es el pilar fundamental del funcionamiento universitario. Esta visión compartida y unificada es clave para preparar a la institución ante el proceso de acreditación del año 2026.
El proceso de autoevaluación, que se iniciará formalmente el 15 de enero con un acto de lanzamiento oficial, fue descrito como un paso crucial para la UNACH. Según explicó Naranjo, ya se habían comenzado a definir comisiones y subcomisiones de trabajo desde octubre, lo que reflejó un compromiso institucional por asegurar altos estándares de calidad en la educación impartida.
El taller no solo preparó a los académicos para participar activamente en la autoevaluación, sino que también promovió una cultura de mejora continua en la institución. «Cada acción, cada proceso, debe estar alineado con los principios de calidad que queremos reflejar como universidad», enfatizó Naranjo.


El proceso de acreditación es un mecanismo clave para evaluar y certificar la calidad de las instituciones de educación superior en Chile. La acreditación no solo verifica el cumplimiento de estándares nacionales, sino que también impulsa la mejora continua y la rendición de cuentas ante la comunidad educativa y la sociedad en general.
La UNACH demostró su compromiso con este proceso, no solo como un requisito formal, sino como una oportunidad para fortalecer sus prácticas académicas y administrativas. «El aseguramiento de la calidad es una responsabilidad compartida, y es vital que cada miembro de nuestra comunidad universitaria comprenda su rol en este proceso», concluyó Naranjo.
Con la participación de toda la comunidad educativa, estos talleres marcaron el inicio de una etapa significativa para la Universidad Adventista de Chile, reafirmando su compromiso con la excelencia y la mejora continua en pos de un proceso de acreditación exitoso en 2026.