Con ceremonias emotivas y simbólicas, la Universidad Adventista de Chile inauguró tres edificios clave: el Comedor Institucional, las Dependencias Deportivas y el Edificio del Servicio Voluntario Adventista, reforzando su compromiso con el bienestar, la formación integral y la misión global.
En un día histórico para la comunidad académica, la Universidad Adventista de Chile llevó a cabo la inauguración de tres importantes espacios diseñados para enriquecer la vida institucional y fortalecer su misión educativa y espiritual.
La jornada comenzó con la apertura del Comedor Institucional, un proyecto anhelado por años que beneficiará a docentes y administrativos. «Un espacio que desde hoy se convierte en un punto de encuentro, descanso y camaradería para nuestra comunidad académica…Lugares donde podamos compartir no solo ideas, proyectos e inquietudes, sino, también, momentos de conversación, pausa y bienestar…Este casino nace con el propósito de fortalecer el tejido humano de nuestra universidad…una institución se construye con vínculos, confianza y con el reconocimiento mutuo entre colegas», destacó el Vicerrector Financiero, Sr. Rodrigo Moreno, durante su discurso.



Posteriormente, se inauguraron las modernas Dependencias del Gimnasio Integral de Acondicionamiento Físico y canchas, destinadas a promover el desarrollo físico y el equilibrio entre mente y cuerpo. El director de Pedagogía en Educación Física, Sr. Cristian Godoy, quien dirigió la oración inaugural, expresó: “Queremos que no solamente sea para fortalecer conocimientos académicos, sino que sea un lugar donde podamos compartir con estudiantes, directivos, funcionarios, académicos en poder fortalecer tu amor y tu palabra».
Por su parte, el Dr. David Gómez, Decano de la Facultad de Educación, resaltó: «Este lugar ha sido concebido con una visión clara, promover el desarrollo integral de nuestros estudiantes donde cuerpo, mente y espíritu crezcan en armonía, como lo propicia el modelo educativo adventista y la educación adventista…Este gimnasio no es solo un lugar para ejercitar el cuerpo sino también, para cultivar valores como la constancia, la superación, el respeto por uno mismo y por los demás, estamos convencidos que este espacio es y será una herramienta clave para potenciar la labor formativa de nuestras carreras». El evento culminó con una oración de dedicación y el tradicional corte de cinta, marcando el inicio de nuevos espacios para el deporte universitario en nuestra casa de estudios.



El momento más emotivo llegó con la inauguración del Edificio del Servicio Voluntario Adventista (SVA), un homenaje al legado de los fundadores de la universidad. El Rector Sr. Antonio Parra, compartió: “Nuestro proyecto educativo tiene un sello especial, tiene un sello distinto, no somos cualquier universidad, el día que nos dediquemos solamente a la academia, a lo técnico nosotros podríamos cerrar esta universidad. Cuando nosotros olvidemos que fuimos puestos en este lugar para cumplir una misión estamos poniendo en riesgo este proyecto».
El Presidente de la Iglesia Adventista del Séptimo día (IASD) en Chile, Pr. Aldo Muñoz, por su parte indicó: «Era un sueño que teníamos hace un buen tiempo atrás, tener un lugar especial donde preparar misioneros y misioneras para todo el mundo y no solo tenemos la infraestructura, sino que, también, tenemos las personas, los alumnos y las alumnas dispuestos para hacer misión no solo en nuestro país sino que en todo el mundo, por lo tanto vamos a abrir este espacio para preparar a nuestros misioneros para la predicación del evangelio».
El Pr. Edson Medeiros, Tesorero de la IASD en Sudamérica , presente en la ceremonia, añadió: «Felicitaciones a la Universidad Adventista de Chile por todo lo que he visto hoy acá…me produce mucha alegría en el corazón ver que nuestra universidad está creciendo en sus instalaciones, en su mirada hacia el futuro. Este espacio representa para mí lo mejor que podemos ofrecer a la iglesia y las personas…la misión es lo que nos hace distintos a las demás universidades…Que esta universidad continúe siendo luz hasta que el Señor venga «.



La ceremonia, enmarcada por las interpretaciones del Coro de Cámara, cerró con una oración dedicatoria y la develación de la placa, sellando el compromiso de la institución con la formación misionera. Estos edificios no son solo estructuras, sino símbolos de un sueño que trasciende fronteras: formar líderes con corazón de servicio y fe inquebrantable, reflexionó una autoridad presente.
Hoy, la Universidad Adventista de Chile escribe otro capítulo de su historia, mirando al futuro con la misma pasión de aquellos misioneros que, hace 119 años, lo dejaron todo por cumplir su llamado.
«El único destino de la UNACH es seguir creciendo, no tiene otro destino y nosotros hoy les presentamos varios proyectos, varios sueños y con la ayuda del Señor y la compañía de cada uno de ustedes podemos ir haciéndolos realidad en el tiempo», concluyó el Rector, dejando un mensaje de desafío y esperanza.