En un mundo donde la vida universitaria suele estar marcada por la presión académica y las largas jornadas de estudio, la Universidad Adventista de Chile ofrece a sus estudiantes una alternativa diferente: un espacio para crecer espiritualmente, hacer amigos y vivir experiencias que trascienden las aulas. Esto es posible gracias a las agrupaciones y movimientos juveniles que, bajo el alero de la Pastoral Universitaria, buscan fortalecer la identidad universitaria y ofrecer actividades que complementan la formación integral de los jóvenes.
Este semestre, las agrupaciones han iniciado sus actividades con gran entusiasmo. Entre ellas destacan Uno más Uno, CEPAC, Fusión, Gemas y SVA, cada una con un enfoque único, pero con un objetivo común: fomentar el crecimiento espiritual y la comunidad entre los estudiantes. Además, los movimientos como PRAY (dedicado a la oración) y Alabanza Universitaria (enfocado en la música y la adoración) ofrecen espacios para que los jóvenes puedan conectarse con su fe de manera creativa y significativa.



El pastor Luis Carlos Barraza, Director de la Pastoral Universitaria, explica que estas agrupaciones no solo son un refugio para los estudiantes, sino también un lugar donde pueden encontrar respuestas a sus inquietudes espirituales. «Los jóvenes funcionamos a choclones», comenta Joyce Celis, Capellana de la pastoral, refiriéndose a la importancia de compartir en comunidad. «Aquí podemos estudiar la Biblia, dialogar sobre nuestras dudas y crecer juntos en un ambiente de confianza».
Además de las reuniones semanales, las agrupaciones organizan actividades especiales como retiros, salidas de ayuda urbana y eventos de consagración. Por ejemplo, el movimiento Ayuda Urbana lleva esperanza a personas en situación de calle, mientras que Fusión realizará un retiro con una santa cena para consagrar el año a Dios. Estas iniciativas no solo fortalecen la fe de los participantes, sino que también les permiten impactar positivamente en su entorno.



Para los estudiantes, estas agrupaciones son más que un pasatiempo; son una oportunidad para hacer amistades duraderas y sentirse parte de una familia. «Las amistades que empezamos aquí duran toda la vida», asegura Joyce, invitando a todos los jóvenes a sumarse a estas actividades. Las puertas están abiertas para quienes deseen participar, y las reuniones se realizan los sábados a las 9:30 de la mañana en diferentes salones de la universidad.



En un contexto donde los jóvenes buscan espacios para expresarse y conectar con otros, las agrupaciones de la Universidad Adventista de Chile se presentan como una alternativa valiosa. No se trata solo de estudiar, sino de vivir una experiencia universitaria completa, donde la fe, la amistad y el servicio se entrelazan para formar líderes comprometidos con su comunidad y su espiritualidad.